La depilación láser es un procedimiento estético que utiliza la tecnología láser para eliminar el vello de manera duradera o permanente. La eficacia de la depilación láser puede variar debido a múltiples variables, como el tipo de piel y vello de cada persona, además de las particularidades del equipo y la técnica empleados. En cualquier caso, es necesario realizar una determinada cantidad de sesiones, que varía en función del sexo, la edad, tipo de piel y vello y zona elegida.
La evolución de las técnicas de depilación ha dado lugar a la aparición de diversos métodos que se adaptan a las necesidades de cada persona. Todos los sistemas de depilación láser son seguros y garantizan que se elimine el folículo piloso sin dañar el tejido de la piel.
Por tanto, debido a que hay diversos tipos de depilación láser, es muy importante saber cómo funciona cada uno de ellos y, sobre todo, saber para qué tipo de vello y piel se recomienda. Así que si estás pensando comenzar un tratamiento de depilación, debes conocer los principales tipos de tecnología de depilación láser que existen. La efectividad de un tratamiento va a depender, en muchos casos, de la combinación de las tecnologías para adecuarse a las necesidades específicas de cada persona.
La depilación láser es una de las maneras más efectivas de deshacerse del vello no deseado del cuerpo ya que tiene como principal objetivo destruir el folículo piloso brindándole calor. El procedimiento implica el enfoque de haces de luz láser altamente concentrada hacia los folículos pilosos, que se encuentran en la raíz del vello. Estos haces de luz son absorbidos por el pigmento del vello, conocido como melanina, generando calor y causando daño al folículo piloso, lo que a su vez inhibe su capacidad de regeneración, por lo que el vello no vuelve a salir.
Las tecnologías de depilación láser disponibles se distinguen principalmente por su longitud de onda, que es una característica fundamental para determinar cuál es la más apropiada según el tono de piel y el color, profundidad y calibre del vello. Uno de los grandes beneficios de la depilación láser es que el pelo desaparece rápidamente y de manera permanente, dejando la piel suave, sin ningún tipo de agresión.
El tipo de depilación láser más utilizado es el Láser Diodo. Debido a su alta potencia, el tiempo de disparo se reduce y destruye la raíz del vello de forma más rápida y eficaz.
Sin embargo, la efectividad de cada tratamiento dependerá, como ya hemos dicho, del tipo de piel (fototipo) y del color del vello. Por esta razón, es esencial ponerse en manos de profesionales que cuenten con la experiencia y los conocimientos necesarios para indicarnos el tipo de depilación láser que mejor se adapte a nuestras necesidades, mediante un análisis previo del vello y la piel.
A continuación, vamos a describir cómo funciona la depilación Láser para eliminar el vello no deseado de manera permanente o duradera. El proceso se divide generalmente en varias etapas.
En resumen, la depilación láser es un proceso que implica varias etapas, desde la evaluación inicial hasta las sesiones de tratamiento y el seguimiento a largo plazo. La efectividad y los resultados pueden variar según la persona y el tipo de láser utilizado, pero en general, la depilación láser puede proporcionar una reducción duradera o permanente del vello no deseado.
Vamos a centrarnos ahora en los tipos de depilación láser que encontramos en el mercado, enumerando sus características más destacadas. Esto nos ayudará a determinar cuál de los procedimientos es más idóneo para cada persona.
Generalmente, se logran resultados más rápidos en personas con la piel clara y el vello oscuro. El vello fino y rubio suele ser más difícil de eliminar, aunque no es imposible. No obstante, cada persona es diferente y es necesario valorar la piel para poder hacer un tratamiento personalizado y eficaz.
La intensidad del láser se puede ajustar según la zona a tratar. El número de sesiones necesarias para una eliminación completa del vello varía según la zona, el tipo de vello y el tipo de piel. En cada sesión se va a ir reduciendo parte del vello, con el objetivo de debilitarlo para que no vuelva a crecer.
▶ Te puede interesar Consejos para prepararse para una sesión de depilación láser
Como hemos adelantado antes, existen varios tipos de depilación láser. Por tanto, es conveniente distinguir entre los distintos tipos de luz y longitudes de onda utilizadas. Los láseres empleados en la depilación operan en el espectro infrarrojo y son invisibles al ojo humano.
Antes de someterse a cualquier tipo de depilación láser, es esencial que un profesional evalúe tu tipo de piel y vello. Aunque la depilación láser se considera permanente, en general se requieren de 6 a 8 sesiones para reducir el vello en un 75 %.
A continuación, os contamos los diferentes tipos de depilación láser que se encuentran disponibles:
El tratamiento con IPL funciona con pulsos de luz policromática que se mueven en distintas direcciones y, por tanto, distintas longitudes de onda, haciendo pulso a pulso por la zona a tratar, lo que permite ser muy eficaz en la eliminación del vello fino con muy poca pigmentación.
El IPL es idóneo para el vello residual y el vello tanto facial como corporal sobre pieles claras.
La depilación IPL se adapta a todo tipo de pieles incluso bronceadas.
Por lo general, se requieren varias sesiones programadas a intervalos de varias semanas para tratar todas las fases del crecimiento del vello. Además, requiere de rasurado previo del vello. Una vez terminado el tratamiento, es aconsejable hacer unas sesiones de repaso cada cierto tiempo para eliminar el vello que pueda ir saliendo.
Actualmente es el láser más utilizado por su versatilidad, ya que se adapta a pieles de diferentes tonalidades y con vello oscuro. Actúa sobre pieles de fototipo I a VI e incluso las bronceadas. Su longitud de onda es de 810 nanómetros, lo que se traduce en que penetra en profundidad en la dermis, eliminando el vello más profundo. Es decir, la luz del láser actúa incidiendo directamente sobre el folículo piloso.
Por lo general, se requieren varias sesiones programadas a intervalos de varias semanas para tratar todas las fases del crecimiento del vello. Además, requiere de rasurado previo del vello. Una vez terminado el tratamiento, es aconsejable hacer unas sesiones de repaso cada cierto tiempo para eliminar el vello que pueda ir saliendo.
Es importante señalar que el Láser de Diodo es eficaz para vello oscuro en contraste con la piel circundante, por lo que suele funcionar mejor en personas con piel más clara y vello más oscuro. Se recomienda, por tanto, para el vello profundo, negro y grueso, como el de la espalda, el tórax o el abdomen de los hombres.
La ventaja principal del Láser Diodo es su versatilidad, pues se consigue eliminar prácticamente cualquier tipo de vello y en toda clase de pieles. Además, es un método que puede realizarse en cualquier época del año.
Se trata de un método que combina la depilación Láser Diodo y el IPL para obtener unos resultados inigualables y apto para casi todo tipo de pieles. Al disponer de ambas tecnologías, en no+vello, nos permite personalizar el tratamiento dependiendo del tipo de vello y piel de cada cliente.
Este tratamiento de depilación ofrece resultados visibles desde la primera sesión. El método Fusion es apenas indoloro ya que previamente se realiza un tratamiento específico sobre la piel para garantizar su eficacia.
▶ Te puede interesar ¿Cómo combinar Láser Diodo con IPL?: Método Fusion
Se trata de un método similar al láser diodo. Empleando una longitud de onda de 800 nanómetros, está indicado para pieles bronceadas y vello grueso, en el que se provoca un calentamiento progresivo para eliminar el folículo sin que se sobrecaliente nuestra piel.
Entre sus ventajas principales destaca que es un procedimiento que no causa dolor y en una sola sesión se puede abarcar una zona muy extensa de piel. Para pieles claras y vellos finos o rubios no es recomendable.
El Láser Alejandrita es un método de depilación láser ideal para pieles claras (fototipos del I al IV) y pelo oscuro, que emplea una longitud de onda de 755 nanómetros. Se recomienda para el vello fino y de mediano grosor. Su empleo es habitual en mujeres para para tratar el vello en zonas como las ingles, las axilas y las piernas, mientras que en los hombres se centra en los brazos y las piernas. Gracias a su mayor tamaño de punta, el Láser Alejandrita puede cubrir más rápidamente zonas más amplias, como la espalda o el pecho.
La depilación Láser Rubí fue una de las primeras en ser utilizadas. Dada su baja intensidad (695 Nm) no es recomendable para pelos oscuros o pieles bronceadas. Debido a su baja eficacia, sólo es apta para pieles claras con vello oscuro. Actualmente este método se ha visto desplazado por otras técnicas más avanzadas.
Este tipo de láser se emplea principalmente para pelo profundo, grueso y oscuro, pues su longitud de onda (1.064 Nm) es una de las que mayor nivel de penetración tiene en la dermis, por lo que está especialmente indicado para fototipos altos, a partir de IV. Además, este procedimiento Neodimio-Yag permite también la eliminacion de tatuajes, especialmente los de color negro y oscuro, así como la eliminación de manchas en la piel o varices y rejuvenecimiento facial.
Para terminar, nos gustaría enumerar cuáles son las múltiples ventajas de la depilación Láser:
Ahorro a largo plazo. A pesar del coste inicial, a medio y largo plazo se ahorra dinero al reducir la necesidad de emplear otros productos y tratamientos.